martes, 29 de marzo de 2011

Historia del Café

Etimológicamente la palabra café viene del vocablo árabe “Kawhah”  que significa bebida y los sitios donde se ofrecía esta bebida se llamaban Kawhe Kanes. El café es originario de la alta Etiopía (antigua Abisinia), posiblemente de la región de Kaffa en donde aún crece de forma silvestre.

Existen varias leyendas e historias sobre el descubrimiento del café. La más conocida y aceptada es la de un pastor llamado Kaldi, que cuenta que sus cabras adoptaban un comportamiento extraño, se notaban muy excitadas y llenas de energía luego de comer el fruto de un arbusto extraño que se parecía a las cerezas. Entonces Kaldi decidió probar las hojas de este arbusto y de inmediato se sintió lleno de energía.

Su interés por este arbusto y sus frutos hizo que los llevara a un monasterio para que el Abad conociera la historia de lo que había sucedido con sus cabras y de cómo se había sentido él mismo luego de haber comido sus hojas. El Abad cocinó las ramas y las cerezas, lo que dio como resultado una bebida amarga que fue desechada y tirada al fuego de inmediato por su mal sabor. Sin embargo, cuando los frutos empezaron a tostarse en las brazas se produjo un agradable aroma y esto llamó la atención del Abad y le dio la idea de preparar una bebida basada en el café tostado. Y de esta manera, nació café.

Los Árabes fueron los primeros cultivadores de café, y descubrieron sus virtudes y posibilidades económicas. De esta manera pudieron desarrollar su proceso de cultivo y lo guardaron como un secreto.
El Café fue unas de las tres bebidas que ha cambiado al mundo, junto al Te y al Chocolate. Estas tres bebidas no alcohólicas que llegaron a Europa hicieron que las costumbres y hábitos de los habitantes del planeta cambiaran para siempre.

El Cacao llegó a Europa de manos de los españoles en 1528, el Te fue llevado por los holandeses en 1610 y, finalmente en 1615 los venecianos llevaron el Café.

lunes, 28 de marzo de 2011

Los diez mandamientos para preparar un buen café

1º. Utilizarás café en grano, recién tostado y de buena calidad
2º. Comprarás cantidades chicas y las consumirás en la misma semana
3º. Conservarás los granos en un recipiente hermético y refrigerado
4º. Molerás solo la cantidad necesaria a utilizar
5º. Utilizarás agua pura y filtrada
6º. Usarás una cuchara de café por taza, de 8 a 10m gramos aprox.
7º. Calentarás el agua y la retirarás del fuego antes de hervir
8º. Te proveerás de una cafetera adaptada a la cantidad de tazas deseadas. La pasarás por agua hirviendo antes de utilizarla.
9º. Servirás el café inmediatamente sea preparado. Utilizarás tazas precalentadas, así el café estará bien caliente al tomarlo.
10º. Siempre prepararás la cantidad justa a consumir, de manera que nunca lo recalientes.

La historia de Nuestra Señora del Café

El café ha sido el pretexto para el encuentro, para una tarde de lluvia, para una aventura con los amigos, una bebida para un momento de fervor o de tristeza. No obstante, al parecer, lo que menos importa es la bebida como tal. Qué pasaría si como caído del cielo existiera un lugar donde el café colombiano, la comida y el servicio sean lo más importante?, por eso cuando Darío Ferreira, un joven empresario argentino con la idea de abrir un restaurante recibió un regalo de café de manos de una colombiana; decidió incursionar en este maravilloso mundo.

En el barrio de diseñadores, punto exclusivo y digno destinatario de exquisiteces,
Nuestra Señora del Café estará abierto al público a partir del 23 de abril. Según Darío, el nombre y el concepto del lugar representa el respeto al productor de café colombiano, la historia y el proceso de recolección que tienen los campesinos con el preciado grano. “La idea era rendirle un homenaje a la Virgen de las Cosechas y valorar la labor del campesino ya que de ese trabajo manual depende el resultado final. El café, añade Darío, que se siembra y exporta desde Colombia es un grano de variedad arábiga que es seleccionado grano a grano escogiendo en el proceso únicamente los frutos rojos o maduros de la planta y luego todos los cuidados manuales que lleva el proceso para que se reflejen al final en la taza todas las virtudes del café en alta calidad, aroma, cuerpo y suavidad”.

Es indiscutible la gran tradición y costumbre del consumo del café en Argentina, por ser un país desarrollado por inmigrantes europeos, que de seguro trajeron las primeras máquinas de expreso al país y con ellas todo el ritual de la preparación. Su permanencia en nuestra cultura es inmensa pero, a pesar de ello, no fue tanto el interés por esta bebida, su estudio o conocimiento. En Nuestra Señora del Café no sólo se podrá degustar de un buen café y sus finos acompañamientos, sino que se podrá llevar a casa un café fresco ya sea en grano o molido al instante y también asistir en las tardes a las diferentes charlas y encuentros programados para degustar y conocer más de esta milenaria bebida. En la noche se podrá disfrutar de un menú especialmente colombiano.

Nuestra ubicación: Gorriti 4788